Sid Meier's Civilization: Beyond Earth para Windows

La serie Civilization a la conquista de las estrellas

Sid Meier's Civilization Beyond Earth es el último juego de esta serie de estrategia por turnos. Tomarás el control de uno de los bandos de este mundo futurista para aumentar tus territorios, con la opción de gestionar aspectos políticos, militares, económicos, culturales y tecnológicos.

Colonizar el espacio no fue nunca tan emocionante

Civilization Beyond Earth retoma claramente las bases de Civilization V. Si nunca has jugado a esta serie, decir que es un juego de estrategia y gestión por turnos en el que controlas a una civilización y la haces evolucionar a través de los siglos mientras desarrollas tu tecnología y territorios. Si los juegos anteriores se emplazaban de la época clásica a un futuro próximo, Beyond Earth propone un tiempo por llegar: la conquista del espacio. Deberás pues colonizar mundos extraterrestres con diferentes niveles de hostilidad. Sí se puede echar de menos en parte el aspecto histórico clásico en la serie, los desarrolladores han construido en contrapunto un mundo coherente al que podría estar dirigiéndose la humanidad. Podrás controlar a los Franco ibéricos o a una coalición asiática. Por el universo, deberás cuidar las relaciones con los extraterrestres de otros mundos en los que intentas evolucionar. Puedes elegir también entre varias actitudes con estrategias bien distintas: exterminación, segregación, cohabitación...

Muchas posibilidades, una interfaz muy sufrida

Este juego espacial supera la profundidad estratégica de la quinta entrega de Civilization y propone muchos modos distintos de intervención. Si bien el excelente sistema del último juego se conserva y mejora (más estrategias y más variedad de fuerzas), aparecen también nuevos aspectos para gestionar la economía y la cultura y llenan uno de los huecos que percibían los fans de Civilization V. Gracias a sus estrategias, los encuentros entre extraterrestres y humanos hacen de Civilization Beyond Earth un juego de lo más apasionante. Aunque también tiene fallos: en su interfaz, resulta muy difícil acostumbrarse a sus horribles menús, incluso tras horas de jugar. El equilibrio es de momento mejorable, con algunas opciones de estrategia muy ventajosas respecto a otras (especialmente al relacionarse con los extraterrestres). Esperemos pues que se corrija sin falta.

Gráficos agradables pero con problemas de optimización

Se conserva el motor gráfico de civilization V, algo evidente a simple vista. Y hay que decir que se trata de un motor excelente: los gráficos son magníficos e impresionan en Civilization Beyond Earth.

Pese a su calidad, Beyond Earth falla a la hora de mostrar una representación clara del campo de batalla y los ejércitos, demasiado poco detallados. El problema más grande sigue siendo el rendimiento del juego: Civilization Beyond Earth es muy exigente en cuanto a procesador y tiene muchas papeletas de ralentizar tu PC. El no poder pulsar ALT+TAB sin riesgo a que el juego se cierre, y los cuelgues en general del juego afectan, por desgracia, a la experiencia de jugabilidad.

Excelente variación futurista de la serie Civilization

Sid Meier's Civilization Beyond Earth es un juego excelente. Los aficionados a la estrategia y a la gestión por turnos tendrán que prepararse rápido, mientras los fans de la serie Civilization no tendrán que leer ni siquiera esta prueba para lanzarse a jugar a tumba abierta. Con un universo de ciencia ficción investigado y adictivo, una mecánica de juego excelente y unas bases siempre apasionantes, Beyond Earth es ya un clásico de su género. No hay que olvidar sin embargo la proximidad respecto a su hermano mayor, Civilization V, o la sensación de no estar terminado que deja el juego en su momento de publicación. Con una interfaz débil y una optimización mejorable, Beyond Earth deja un regusto amargo. Pero ver sus decorados futuristas y sus apasionantes mecánicas de juego hace que se le pueda perdonar todo a esta pequeña maravilla. Tal vez después de unas cuantas actualizaciones el juego se acerque a la perfección soñada por los amantes del género...